primero una sensible irritación, después los ojos colorados y algo ardidos, una voz entrecortada pero todavía firme, una mirada que se desvía pero vuelve a su rumbo pronto, y ahí está, una tímida lágrima que se asoma como pidiendo permiso al ambiente. mi cuerpo intenta en vano volver a ponerla en su lugar, una respiración forzada y al fin el resto de todo lo que se viene rebalsando dentro de mi sale de una forma atrevida y sin consuelo.
pocas veces llegue al punto en que no haya manera de aguantarlo, sin esfuerzo, sin congestión, sin gusto, una por una se iban deslisando y llegando a mi boca para unirse con mis palabras y así dar forma concreta al concepto de dolor. dolor que sienten mis entrañas y ya no saben de qué modo gritarle al mundo para que de una vez pare.
sábado, 12 de febrero de 2011
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario