domingo, 27 de julio de 2008

Todavía quedan restos de humedad,
sus olores llenan ya mi soledad,
en la cama su silueta se dibuja cual promesa
de llenar el breve espacio en que no está.

Todavía yo no sé si volverá,
nadie sabe al día siguiente lo que hará.
Rompe todos mis esquemas,
no confiesa ni una pena,
no me pide nada a cambio de lo que dá.

Suele ser violenta y tierna,
no habla de uniones eternas,
mas se entrega cual si hubiera
sólo un día para amar.

No comparte una reunión,
mas le gusta la canción que comprometa su pensar.
Todavía no pregunté "¿te quedarás?".
Temo mucho a la respuesta de un "jamás".
La prefiero compartida antes que vaciar mi vida,
no es perfecta mas se acerca a lo que yo
simplemente soñé...

Suele ser violenta y tierna,
no habla de uniones eternas,
mas se entrega cual si hubiera
sólo un día para amar.

No comparte una reunión,
mas le gusta la canción que comprometa su pensar.
Todavía no pregunté "¿te quedarás?".
Temo mucho a la respuesta de un "jamás".
La prefiero compartida antes que vaciar mi vida,
no es perfecta mas se acerca a lo que yo
simplemente soñé...


De ésto me hablabas?..

martes, 22 de julio de 2008

Más de cien mentiras..

El que miente lo hace por propio gusto, está comprobado. Es como si al mentir el hombre se siente vivo, picarón, en un estrato superior, como ganando el primer lugar del podio.. algo asi.
La sensación me es difícil de describir porque cuando mentí la pasé mal, bastante mal, culpa, persecución, aislamiento, cosas que mejor no acordarse y que me hicieron ver que decir una cosa por otra cuando ningún beneficio a la larga te va a traer, era mejor no decirla.

A ver.. si a mi no me costó aprenderlo, por qué los hombres se empeñan en embarrarse? y con situaciones tan obvias! (porque soy mujer es una buena respuesta)

Es lógico que una novia enamorada no vea un elefante que le esté soplando la nuca a su marido, es entendible que una madre no quiera aceptar las locuras de los hijos, es hasta aceptable que un amigo no pueda creer la traición de su compinche.. pero vamos!
Las minas estamos curadas de espanto, desconfiamos hasta de lo obvio, salimos a la calle con botas de plomo, con los ochenta pares de ojos que ganó la abuela en cada té canasta, con pañuelos para la garganta en pleno verano, con el corazón bajo treinta juegos de llaves, preparadas en fin.
Una típica cara de mujer ya no está caracterizada por la sensualidad, la boca entreabierta a lo Gaetani, la mirada fija pero distante. Hoy las circunstancias nos obligan, boquita cerrada y apretada para que se formen pequeñas grietas de fastidio; la vista entre pestañas y una poca presión de ceño amenazante, y la nariz apenas fruncida para tampoco asustar a la presa. Es como vivir en estado de sitio, en alarma meteorológica constante.

..Y aún asi, él se esmera! Y miente..

Pobre, ahora no sólo fue descubierto y tildado de por vida, sino que además es motivo de la risa del grupo femenino semanal: Señoritas en pro de hacer la vida del masculino un calvario S.A.

A despertarse varones..! las muchachas ya no están hundidas en tarros de ingenuidad, y aunque esto nos juegue en contra lo digo y lo sostengo, hoy en día sólo es un arma más en esta guerra de los sexos. Con técnicas de seducción, de amabilidad, de dolor no sentido, de ingenuidad, de fingida ignorancia, con mantos de fidelidad hechos a base de agua, aprovechando oportunidades laborales a dosmil kilómetros, con un doctorado en excusas, con el discurso de la debilidad como Constitución, hasta la presidencia del país hemos ganado.

Nada es lo que parece y guardamos màs de lo que su mol de masa encefálica podría preveer..

A mamá mona con bananas verdes.. ay ay ay..!! (no por nada es una frase tan conocida y aplicada)

lunes, 21 de julio de 2008


Creí que unos lindos ojos azules podían sacarte de mi cabeza.
Grave error. Otra vez.

.. de todos modos nada quita que sean un lindo par de ojos azules..

martes, 15 de julio de 2008

Q

creo que es más la falta de ganas que de tiempo.., ni siquiera es una cuestión de creatividad. Sólo de ganas. Eso las ganas.

martes, 1 de julio de 2008

Una ley que no encuentra su sistema.

El hecho de vivir en una sociedad codificada y no haber aprendido las leyes que la rigen me genera ciertos problemas cotidianos y complicaciones de índole moral a veces traumatizantes. Son dilemas de eticidad que no lo logro superar, o mejor expresado, asimilar. Prefiero taparlos o simplemente pormenorizarlos para no sufrirlos. Qué tan felices podemos ser con una moral inadaptada, con excaso sentido de la culpabilidad, si vivimos en un lugar donde la culpa hace eficiencia en la conciencia de los más que nos rodean.
Pedir perdón no es constitutivo de mi ser, las personas necesitan que les pidamos perdón. Con palabras o con hechos, para mi es igual, ninguna de esas formas se adapta a mis ideas. Siento además que si tuviera limpias esas mismas, o si bien encontrara los decires para validarlas frente al resto tal vez hallaría una salida de emergencia eficiente o bien las soluciones para los efectos de mis actos y dichos.
Supongo que la cuestión es una diferencia tajante en la apreciación de la trascendencia tanto de los actos como de las palabras, en cada circunstancia, en cada relación, en todas las vicisitudes y en cada movimiento lo que me distancia es la relevancia que en mi merecen, la poca relevancia queiro decir. A nadie más le pasa, todos a su manera se preocupan, se movilizan, se incentivan o deprimen y reprimen, yo no puedo.
Mis vaivenes o baibenes, todavía no aclaro eso, nacen de mi, mueren en mi. No se ven influídos por el sector externo, este se mantiene siempre ajeno, constante y ajeno.
Y así soy yo la que se aleja. Queriendo y no.
Empiezo a pensar que todo sería más fácil si creyéramos en Dios. O a lo mejor en la culpa judía, o en el clamor y salvación de Cristo; pollera nuevo testamento en mano y algunas caminatas, así tendría respuestas. Con el único argumento que la fe, pero respuestas al fin.
Otro camino podría ser la reveldía, como militante de la izquierda subversiva, o como punk de ojos y ropa negra, o porqué no tambien como indigente en la plaza Libertad con Rómulo y par de mudas de ropa que después de un tiempo dejaría de usar.
Abogada por qué no? Sabiendo de todo código nacional, provincial, leyes complementarias, decretos a veces inconstitucionales, sobre política, economía, sociología, la historia de la codificación que de todos modos no llego a concebir desde los fenicios hasta los más desarrollados romanos pasando por la lucha entre Atenas y Esparta, y estudiando cada revolución industrial, francesa, rusa, la guerra fría..
Y todo para llegar al mismo lugar en que aún nada me vale la pena. La verdadera pena, porque se reconocer que también vivo en la superficie, y a veces suelo ser parte. Es que de otro modo no tendría qué hacer. No hay sentidos, no hay realidades, solo apego a las costumbres. Costumbres que no comparto, que no entiendo, que no acepto.
En muchas ocasiones mi consuelo fue creer en que todas son etapas que desembocan en una vida que todavía no empezó. Pero tampoco funciona, no le encuentro sentido a hacer, estudiar, decir, estar, para luego vivir.. no es acaso una pérdida de tiempo? o en su caso no me estaré demorando mucho en empezar con la que sí será mi vida, ya van 22 años. Ok el tango dice veinte años no es nada pero, y los dos últimos de yapa? tampoco?.
Y le pongo empeño, me cuesta crear compromisos de largo plazo, pero al menos en el corto le pongo empeño, y trato de insertarme. Me hace sentir igual que a un ex-convicto que transgredió el sistema y ahora debe volver a adaptarse si no quiere seguir privado de libertad. Mi casa es lo que sería mi prisión o mi refugio en el mejor de los casos, de todos modos salir es una cuestión difícil, y reinsertarse a un sistema puf! Máxime cuando detesto ese sistema, tan determinado, lleno de prejuicios, minado de personas sensibles que explotarían con sólo pasarles por al lado. Gente que te quiere querer, no lo dudo; pero también víctimas potenciales de nuestra inestabilidad y falta de compromiso. El cómo hacer para reparles el dolor sin sentir arrepentimiento o el devolverles la confianza cuando soy yo quien no confío en nada y menos en nadie, eso aterra.
Cómo, en un mundo basado en códigos de confianza, de fe, de lealtad, de amor.. cómo vivo si no conozco el significado de esos términos.
Ahora estoy delirando, lo se.