sábado, 22 de enero de 2011

cuando ya no aguanto las palabras.

tengo un agujero en el pecho, tan vacío, tan doloroso, tan desauciado, tan sin consuelo. me cuesta todos los días un poco más seguir respirando, seguir "viviendo", seguir aguantando sin que no estés. no extraño todo. se claramente que no me sirve para nada futuro ni duradero. y sin embargo, a veces sólo llenaría mi espacio con puros momentos. momentos llenos de vos.
todos los días te hablo un poco menos. cada día aparece una sonrisa más, un deseo chiquito, unas ganas locas de algo más, mañana tras mañana parezco ir sanando, o tapando será.
aún si me esfuerzo, aún si me engaño, aún si me convenzo, aún todo.. siempre estás ahi. siempre está mi corazon esperando. no me acuerdo de ningún minuto en el que no hayas estado en mi en este último mes. te pienso, te veo, te busco, te recuerdo, te odio, te mato mil veces, te imagino, te espero, te amo cientos de miles de veces al día. me estoy volviendo loca.
todos me dicen que te voy a olvidar, incluso hay segundos en los que hasta yo me animo a creerlo, hago todo lo posible por no saberte, por no enterarme de nada que te relacione, hago lo más que no puedo para alejarme de esa absurda idea de un nosotros.
a veces te deseo la felicidad que yo no tengo, otras los peores males, otras ruego que ya ni sepas quien soy, trato perder el registro tu persona, para lograr algun día ni reconocerte, pero todavía no consigo nada, se que sos vos cuando estás parado, se que sos vos el que se refleja en ese vidrio, se que sos vos por tu olor, por tu presencia, por tu forma, por tus horas, sos vos. y yo ahi, te estoy viendo.
algo llegó a darme ánimo, una especie de respuesta a las tantas preguntas que no paro de hacerme, un pensamiento que no deja de ser insuficiente: mi estructura emocional me permitió acompañarlo, escucharlo, creerle, matarlo, resucitarlo, curarlo y perdonarlo... pero mi estructura lógica me fulminó cuando trate de comprenderlo.
No soy una persona que pueda convivir con aquello que no comprende, desde nunca. Jamás me pude conformar con ésto es así o se hace así, siempre indagué el porqué, el cómo, el para qué.. y ni siquiera me alcanza con entender, porque entenderte sólo me dió las herramientas para salir de vos con tu mismo juego, con el mismo desprendimiento de responsabilidad, con la misma altanería y la cuota de bronca y orgullo necesarias para no temblar. No te pude comprender, y ya no voy a poder hacerlo más. porque hoy tengo otros oídos, hoy tengo otros ojos para verte y verme.,
de cualquier forma me sigue doliendo, el pecho, la piel, el propio agujero me duele. te sufro y te necesito y te amo tanto que ojalá no vuelva a saber de vos nunca en lo que me reste de cordura.
no es justo que te quiera más de lo que a mi, llevo muchos años cargando conmigo y mis sueños como para regalar todo en tu nombre. hice bien. y un día, quizas cualquiera, me voy a dar cuenta.

No hay comentarios: