viernes, 7 de enero de 2011

una muerte conciente

sin dudas algo murió en mi. eso que muchos llaman tu alma. tu esencia. tu alegría tal vez.
me convertí en un fantasma, encarnada a este plano, a este cuerpo sin vida, sin luz.
ya van meses de no saber qué se siente con una carcajada, ya van meses que no encuentro placer ni en la comida, ya van meses que me refugio en alguna bebida, son muchos ya los días en que el sueño se venga de mi de alguna manera.
rendir bien, rendir mal, que me llamen para trabajar, que no me llamen, hablar, escuchar, callar. todas una misma sensación. la nada misma.
me perdí y aún sabiendo dónde, ni siquiera intento ir a buscarme.
esta claro que me tengo que limar, al menos un poco, la gente que me rodea no tiene la culpa. de nada. yo soy quien está mal o triste o perdida. ni siquiera él tiene la culpa. al fin y al cabo soy yo quien decide salir de esa historia, soy yo quien se inmola hoy, para darle quizá la esperanza a otra cara de mi, en algun futuro.
soy puro dolor y desgano. soy la resignación del amor en carne viva.
ya ni te odio.

1 comentario:

DIVA dijo...

Una seguidilla de escritos negros y cuasi suicidas... NO me gusta. El desahogo es sano.
Pero no te olvides chiqui, que para levantarse bien alto hay que tocar fondo, y vos mami...le vas a pasar el trapo al Ave Fénix. Yo te lo garantizo.